Si quieres que tu temporada de baño, hazlo con placas solares.

Queda poco para el otoño, pero eso no significa que la temporada de baño tenga que acabar. Gracias a la climatización, puedes usar tu piscina durante todo el año si quieres, y de entre todas las formas de climatización que existen, bombas de calor, intercambiadores con caldera… Hoy te descubrimos la climatización con placas solares, una manera fácil, práctica y ecológica de calentar el agua de tu piscina. ¿Quieres saber cómo funciona? Sigue leyendo:

El funcionamiento de la climatización a través de placas solares es muy sencillo y además resulta más económico que otros sistemas. Para poder calentar el agua de una piscina se necesitan paneles solares térmicos, también llamados colectores solares. Una bomba de agua hace que esta circule a través de un filtro, que elimina las impurezas del agua evitando así que se produzcan obstrucciones. El agua sigue los colectores, que son los encargados de calentar el agua gracias a los rayos del sol, una vez caliente el agua vuelve a la piscina ya con una temperatura más cálida.
Los colectores solares suelen estar fabricados en diferentes materiales, según el uso que se les vaya a dar, normalmente los colectores para piscinas privadas de unas dimensiones estándar suelen estar fabricados en plástico altamente resistente.
El agua de la piscina se calienta a una temperatura media de entre 24ºC y 27ºC, que es la temperatura ideal en piscinas de exterior para los meses fríos del año.

Si te estás planteando la instalación de placas solares para la climatización de tu piscina estos son los factores que debes tener en cuenta:

El tamaño y profundidad de la piscina.
La protección contra el viento de tu piscina.
La ubicación a nivel geográfico.
La cantidad de luz solar de la zona.
Otros sistemas de climatización: cubiertas, mantas térmicas.
Temperatura que se quiere alcanzar.
Disposición de los colectores.

Los mayores beneficios que te pueden aportar los colectores solares sin duda son a nivel energético, ya que al tratarse de una energía 100% renovable, en primer lugar no consumen energía. De hecho, te ayudarán a ahorrar ya que este mismo sistema de climatización puede utilizarse también para proporcionar electricidad en el hogar. En segundo lugar, son totalmente ecológicos. No producen ningún tipo de contaminante que afecte a tu piscina, tu hogar o tu familia, y por supuesto son respetuosos con el medio ambiente. Y en tercer y último lugar, son económicos. Las pérdidas de radiaciones son mínimas, con lo que aprovecha el total del calor que recoge y gasta menos. Son sistemas con un precio de compra muy razonable, una media de 5000€, y existen muchas subvenciones para poder realizar el cambio de instalación.